La tecnología de última generación permite recopilar cantidades ingentes de datos. Estos datos son integrados en sofisticados algoritmos y, mediante sistemas de aprendizaje automático (machine learning), es posible inferir rasgos, características e, incluso, hacer predicciones sobre las personas o tomar decisiones de una forma absolutamente automatizada.
Así, en el ámbito laboral, las empresas pueden recopilar información de las personas trabajadoras, relativa a sus capacidades, aptitudes, conocimientos, etc., y tomar decisiones sobre contratación, retribución, promoción e, incluso, despido de forma íntegramente automatizada.
LABORAlgorithm es un proyecto de investigación financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, que tiene por objeto analizar el uso de los algoritmos y de la tecnología inteligente en la relación laboral y, en concreto, el tratamiento jurídico de la elaboración de perfiles y la toma de decisiones automatizadas en el ámbito laboral.
Anna Ginès i Fabrellas, profesora titular de Derecho del Trabajo de Esade e investigadora principal del proyecto LABORAlgorithm, analiza los retos que debe abordar la legislación laboral ante la proliferación del uso de algoritmos en la elaboración de perfiles y decisiones automatizadas. “Estas prácticas suponen una amenaza para el principio de igualdad y no discriminación, puesto que el uso de variables o bases de datos sesgadas genera verdaderos problemas de discriminación. Las discriminaciones existentes no desaparecen por arte de magia, sino que se codifican, se automatizan y se sistematizan.”