Planificación estratégica de plantillas: El valor de la anticipación

Este y otros artículos están recogidos en La ecuación del éxito profesional, el nuevo libro de David Reyero.

El mundo empresarial actual es trepidante: globalización, incertidumbres múltiples, competidores disruptivos, guerra por el talento… 

Para dar respuesta a tantos retos, tenemos que ponernos manos a la obra para asegurarnos un buen presente. Monitorizar los resultados a corto plazo nos da el pulso de nuestra salud corporativa. 

No obstante, las mejores compañías no se quedan ahí. Tratan de visualizar y anticipar su futuro para no ser espectadores pasivos, sino protagonistas de su porvenir. 

Hoy las organizaciones excelentes complementan los tradicionales planes estratégicos de negocio a 2, 3 o 5 años vista con una potente planificación estratégica de plantillas. Un ejercicio estratégico que puede parecernos novedoso, pero que tiene larga historia. El término ‘Strategic workforce planning’ fue definido originalmente en 1880 por Frederick Winslow Taylor. 

Esta iniciativa nos ayuda a ampliar nuestra perspectiva al hacernos preguntas tan necesarias y poderosas como: 

• ¿Cuál será la evolución previsible del negocio y su impacto en gestión de personas? 
• ¿Cómo evolucionará el contexto externo (riesgos y oportunidades)? 
• ¿Qué mentalidad y habilidades profesionales (duras y blandas) necesitaré a medio plazo para tener éxito? 
• ¿Cómo cubrir esos gaps, con desarrollo interno o selección externa? 
• ¿Cuál es la mejor estructura organizativa para nuestra estrategia a futuro? 
• ¿Qué fortalezas tiene nuestro equipo humano que debemos potenciar a medio plazo? 
• ¿Qué roles serán emergentes o tenderán a desaparecer? 
• ¿Cómo maximizar las oportunidades de crecimiento de las personas más allá de las promociones obvias? 
• ¿Cómo evolucionar mi pirámide de población interna (incluyendo jubilaciones, rotación voluntaria…)? 
• ¿Qué retos y oportunidades tendré en cuanto a costes laborales totales? 
• ¿Qué impacto tiene esta visión a medio plazo (3-5 años) en las políticas clave de gestión de personas? 

Beneficios de la planificación estratégica de plantillas

Algunos de los puntos positivos más relevantes que ofrece este tipo de planificación son: 

• Vincular más la gestión de personas con la estrategia y retos de negocio 
• Anticipar oportunidades y riesgos, con mejor aprovechamiento de las nuevas capacidades de people analytics
• Tomar decisiones de más calidad y basadas en datos y no sólo en históricos o intuición 
• Más proactividad en la gestión de personas y mayor calidad de ejecución  
• Clarificar las ratios clave que nos permiten monitorizar el avance de nuestra estrategia de personas y su impacto en negocio 
• Predecir mejor el futuro para poder gestionarlo activamente, con más tiempo y sin estar apagando fuegos continuamente 
• Comunicar mejor la visión de gestión de personas interna y externamente al tener una hoja de ruta más clara  
• Evolucionar continuamente nuestra gestión del capital humano, aportando un enfoque riguroso  
• Mejora de factores clave en gestión de personas: compromiso, crecimiento del equipo, productividad… 

En la vorágine diaria hay que pararse periódicamente para tener más claridad y moldear nuestro futuro, al menos en cierta medida. Nadie está a salvo de potenciales ‘cisnes negros’, pero esta planificación estratégica nos ayuda gestionar mejor los riesgos y capturar las oportunidades.  

Un ejercicio que debe ser vivo y siempre abierto a mejora y a integrar con agilidad nuevos datos internos y externos que afinen nuestra hoja de ruta. “Planificar es traer el futuro al presente para que puedas hacer algo al respecto ahora”, afirma Alan Lakein. 

Creo que la excelencia es mezcla de datos e intuición, inteligencia artificial y humana, planificación y propósito, presente y futuro. Aprovechemos el poder de la tecnología y los datos para multiplicar el duende y el arte de cada persona, su talento y lo humano al siguiente nivel.